'Cutie and the Boxer', un retrato de 'la pintura de boxeo' en Zabaltegi

El artista neo-dadá Ushio Shinohara y su mujer Noriko, protagonistas del debut 'punch' de Zachary Heinzerling que se exhibirá en el Zinemaldia.

Publicado: 31/08/2013

El artista nipón 'avant-garde' y boxeador Ushio Shinohara, influido por el expresionismo americano, los cómics y el jazz, se convierte junto a su esposa y compañera de trabajo, Noriko, en el protagonista de 'Cutie and the Boxer', el debut 'punch' de Zachary Heinzerling. Galardonado en el pasado Sundance con el premio al mejor director en la categoría documental, y con reseñas excepcionales en su paso por Tribeca, se exhibirá en Zabaltegi, la 'zona abierta' del Zinemaldia, que se celebrará del 20 al 28 de septiembre.

Este himno al amor eterno explora la relación caótica del matrimonio japonés que se conoció cuarenta años atrás en New York, cuando este 'enfant terrible' se marchó a Estados Unidos con la esperanza de abrirse hueco en el complejo mundo del arte y conseguir un reconocimiento internacional que nunca se materializó. “En última instancia, mi objetivo era cautivar al espectador mostrando a esta pareja en toda su belleza y su desnudez”, explicó el joven cineasta a propósito de la proyección del documental en Sundance, asegurando que “quería abrir una puerta para que el público se sumerja en el mundo creativo y privado de los Shinoharas como si se tratara de un juego”. El resultado es un retrato íntimo de su sorprendente asociación, cimentada sobre un vínculo que trasciende los problemas económicos y artísticos.

En torno a la exposición conjunta 'Yomiuri Independent' en el Tokio de los 60, Shinohara fundó un grupo neo-dadá, integrado por artistas de gran influencia posterior como el conceptual Genpei Akasegawa o el arquitecto Arakawa Shusaku (“el más filosófico de los artistas contemporáneos”: Danto dixit), que comulgó con el 'ready-made' duchampiano para subrayar el carácter 'anti-artístico' de determinadas manifestaciones, llevando a sus últimas consecuencias la filosofía del 'objet trouvé' para adquirir la etiqueta de 'junk art' ('arte basura'). Esculturas confeccionadas con piezas de motocicletas y todo tipo de 'detritus' asociados a la sociedad del consumo y a los medios de masas, fueron las armas de un movimiento efímero cuya sombra es alargada.

Desde esta época, el japonés viene realizando lo que él mismo ha llamado 'pintura de boxeo', similar al 'action painting' inaugurado por Jackson Pollock, donde la energía es vital en la ejecución de una obra. Para la creación de sus abstracciones, que expresan sensaciones mediante el color, se coloca sus guantes de boxeo, los sumerge en cubos de tinta sumi o pinturas acrílicas, y golpea a puño limpio lienzos de gran formato como si se tratara de su último combate.

Heinzerling captura el pasado y el presente de dos almas entrelazadas tanto, en el hogar como en el arte, así como el desequilibrio profesional entre el octogenario y su sufrida cónyuge. La perseverancia de Noriko, que como artista ha permanecido eclipsada por la personalidad de su marido, y la fuerza de voluntad de Ushio, cuya existencia es una lucha de superación por mantenerse a flote en el 'ring' de la vida, centran esta ópera prima.

María José López

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