'Nude Area', el retrato hipnótico sobre la seducción femenina de Urszula Antoniak

El tercer trabajo de la directora polaca, heredera del cine de Lars von Trier se inspira en 'Vivre sa vie' de Jean-Luc Godard.

Publicado: 18/04/2013

Si en la meridionalidad del cine de Lars von Trier el papel de la mujer venía a simbolizar el concepto de redención cristiano en un puro arrebato de negación nihilista (encarcelada en una visión masculina) cuyo martirio sobrecoge al espectador (caso de la impedida psíquica de 'Rompiendo las olas', la ciega de 'Bailando en la oscuridad' o la extranjera en 'Dogville), 'Anticristo' supuso un giro de tuerca que también tantea en 'Melancolía'. La protagonista se opone al arquetipo social que debería encarnar, el de buena madre y mejor esposa. En un impulso autodestructivo, la mujer fracasa, pero ahora intencionadamente (con premeditación y alevosía). En esta frustración no hay espacio para la expiación ni la empatía, son personajes que plantan cara, sufren pero no se presentan como víctimas. Una imagen de lo femenino adoptada por la polaca Urszula Antoniak (afincada en Países Bajos), considerada por muchos heredera de ciertos patrones temáticos y estilísticos del danés (no en vano, co-produjo su segundo largometraje, 'Code blue', estrenada en la Quincena de los Realizadores en 2011 a través de su productora Zentropa), que ultima su tercer trabajo, 'Nude Area'.

Inspirado en 'Vivre sa vie' de Jean-Luc Godard, el nuevo film de Antoniak, que narra las primeras experiencias sexuales de dos adolescentes, es un retrato hipnótico sobre la seducción femenina y la belleza. Naomi (Sammy Boonstra) y Fama (Imaan Hammam) residen en la capital holandesa en barrios muy distintos. Mientras la primera vive en el sur de Ámsterdam, la zona más próspera; a la segunda, de origen marroquí, le toca en el área occidental, mucho más modesta. Cuando Fama descubre que su amiga se ha enamorado perdidamente de ella, nace un juego de amistad, seducción y atracción que durará un verano.

En su breve filmografía, la directora ha mostrado a sus protagonistas como chicas marginales y solitarias, pero siempre por elección propia. En el caso de Lotte, en 'Nothing personal', una joven muy rebelde que apuesta por el aislamiento como opción vital sin ánimo de convertirse en un reflejo lacrimógeno. Y en 'Code blue', Marian, una enfermera tan hermética como gélida, desvelará que sus carencias no son afectivas sino enfermizamente sexuales, remitiendo al papel que Charlotte Gainsbourg interpretó en 'Anticristo'. Sin embargo, 'Nude Area' promete ser más optimista y menos provocadora que sus obras anteriores.

M. J. López

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