Septimo Vicio - El cine visto desde otros t iempos

'Closed Curtain' de Jafar Panahi: subrepticia pero no invisible

La última película del iraní, exhibida recientemente en Toronto y premiada en la Berlinale con el Oso de Plata, se proyectará en Noves Visions de Sitges.

Publicado: 15/09/2013

La segunda cinta encubierta del iraní Jafar Panahi desde que consiguió enviar al Festival de Cannes en un pendrive 'Esto no es una película' (2011), 'Closed Curtain' ('Pardé, en persa), co- dirigida junto a Kambozia Partovi, compitió en la Berlinale (donde se alzó con el premio al mejor guión) y se exhibirá en Noves Visions del próximo Festival de Sitges, el cual la publicita como “una bella fantasía alegórica sobre el Irán contemporáneo”.

Intelectualmente compleja y plagada de referencias metafóricas, en alusión a la prohibición bajo amenaza de cárcel que impide al cineasta realizar cine durante los próximos veinte años (también a la tristeza y la melancolía que padece a causa de la censura y la coyuntura política que lo ubica en una lamentable situación artística), el último trabajo del persa, además de ser un exorcismo autobiográfico, vuelve a poner el dedo en la llaga con otra crítica contra la represión y a favor de los derechos de las mujeres en su país.

El protagonista (Kambozia Partovi, que co-firmó el libreto de 'El Círculo'), un guionista enigmático, llega a una casa aislada de tres pisos con vistas al mar Caspio en compañía de su perro clandestino Boy (toda una provocación por parte del cineasta, ya que los perros son considerados animales impuros por la sharia islámica). Para ocultar su identidad, lo primero que hace es raparse la cabeza y cubrir todas las ventanas con cortinas tupidas y opacas. Una noche de tormenta, dos desconocidos, Melika (Maryam Moqadam) y su hermano Reza (Hadi Saeedi), irrumpen en su domicilio, y le confiesan que están en peligro porque los persigue la policía por asistir a una fiesta ilegal en la playa donde se consumía alcohol. Cuando el autor les pide que se marchen a otro lugar, Reza se va a buscar el coche y le solicita que durante su ausencia no pierda de vista a Melika, puesto que es muy vulnerable y tiene impulsos suicidas. Poco a poco, la chica comienza a importunar al escritor, hasta tal punto que empieza a obsesionarse con la idea de que pueda ser una espía.

M. J. López

Tags:

Novedades en Septimovicio





Tags populares