Kristina Buozyté explora la naturaleza del deseo en 'Vanishing waves'

La cinta, ganadora del Méliès de Oro a la mejor película fantástica europea, clausuró el Festival de Cine Fantástico de Bilbao.

Publicado: 15/05/2013

Hipnótica y melancólica de principio a fin, 'Vanishing waves' centra su atención en Lukas, un científico que investiga la región neuronal. Su perfil le convierte en el candidato idóneo para someterse a un experimento revolucionario: conectar su mente a la de una mujer en coma. Lo que no esperaba es enamorarse de ella en ese espacio mental, distanciándose progresivamente del mundo real. Aunque su directora, la joven Kristina Buozyté, lo presenta como «una incursión romántica en la ciencia ficción», el filme también se aproxima al thriller psicológico con sugerentes dosis de erotismo.

«Aunque adopté un punto de vista intimista y profundo para explorar la naturaleza de la pasión y el deseo, es cierto que lo planteé desde una perspectiva científica, próxima a la neurología. Es una especie de aventura introspectiva», explica Buozyté, que recibió el asesoramiento de especialistas franceses e irlandeses para dotar de cierta entidad y verosimilitud a la trama.

Como "Beyond the black rainbow", alude en un primer momento a la ciencia ficción intelectual, exigente y pretenciosa surgida a raíz del estreno de '2001, una odisea del espacio'. «Mentiría si dijese que partimos de cero. Siempre afloran influencias de otros cineastas, sean conscientes o no. A la hora de crear el universo de la película, el director creativo Bruno Samper y yo teníamos muy presente el legado de Stanley Kubrick», reconoce.

La tecnología ocupa un lugar privilegiado en el argumento, dado que en nuestra sociedad «Internet, las redes sociales y los teléfonos de última generación han influido decisivamente en nuestro comportamiento y en la comunicación. Quería hablar de lo mucho que ha cambiado nuestra manera de relacionarnos». Además, la alargada sombra del movimiento surrealista de la Europa del Este se deja sentir sobre la imaginería y los símbolos de la cinta. Al respecto, la realizadora lituana cree que «el surrealismo es un medio ideal para explorar determinados conceptos visuales o filosóficos. Permite tantear la complejidad de la psique y las áreas intangibles de lo humano».

Casos como el de la brasileña Juliana Rojas o el de la propia Buozyté recuerdan que el fantástico no es un terreno exclusivo de sus compañeros masculinos. «En Suecia, por ejemplo, el Gobierno subvenciona el cine dirigido por mujeres. Entrar en la industria es complicado, pero recomiendo paciencia y esfuerzo. Ni el éxito ni el arte atienden a cuestiones de género. Lo importante es ser efectivo y llegar al público».

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